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HUERTAS PARA LA VIDA

“Resignificando el territorio” 

Encontrar el lugar es un poquito complejo por la ubicación, aunque no es difícil la llegada desde el rincón de Suba, tampoco lo es, desde el sector de Aures, ya que estratégicamente esta geo referencialmente ubicado en un punto que se conoce como el brazo del Humedal Tibabuyes, rodeado de Instituciones de educación pública entre los que se encuentran los colegios, Álvaro Gómez Hurtado, Gonzalo Arango y La Nueva Colombia.

El brazo del Humedal Tibabuyes, que infortunadamente ha pasado sin pena, ni gloria, de cara a varias administraciones, bajo la Batuta de la Empresa de acueducto y alcantarillado de Bogotá (EAAB), es un espacio que se percibe como una zona deprimida, que irónicamente contrasta con su riqueza natural, aún a pesar de las fuertes problemáticas, que a lo largo de los años, se han acrecentado y acumulado, convirtiéndolo en un canal abierto de aguas residuales que en su mayoría tiende a desbordarse toda vez que llueve, produciendo fétidos olores, inundando las zonas residenciales del sector, y haciendo de este, un lugar de habitabilidad de calle, indigencia y Consumo de sustancias psicoactivas de todo tipo, situaciones que han afectado a toda la comunidad del barrio el Carmen y Villas del Rincón y los barrio aledaños.

Sin embargo ese capital social tiene en su haber dolientes dispuestos a levantar acciones de recuperación y resignificación, porque el trabajo y prestancia que la administración le ha dado a este espacio para su recuperación, mejoramiento y desarrollo, ha sido mínima, sino “nula”.

Y ante la poca injerencia estatal, las comunidades habitantes del sector, decidieron asumir este espacio compartido en plana pandemia para la creación de una huerta que les permitiera, la siembra y la fertilización de la tierra a través de una técnica de compostaje anaerobio, denominada “PACAS DIGESTORAS”, una biotecnología limpia, ecológicamente eficiente y desarrollada desde hace más de 20 años en diversos lugares de país, un trabajo voluntario de economía solidaria.

Hablamos con el colectivo que asumió este rol tan importante, y su relato sonoro es denunciable, claro, pedagógico y eficiente en estos tiempos difíciles.